En respuesta al impacto del COVID-19 en el mundo, Estée Lauder, así como sus fundaciones corporativas, ha decidido destinar 2 millones de dólares a Doctors Without Borders/Médecins Sans Frontières (MSF) para apoyar su trabajo por el mundo y su respuesta contra el coronavirus en países con pocos recursos y altamente impactados.

Asimismo, en Nueva York, donde se encuentran las oficinas principales de la compañía, se ha realizado una donación a The NYC COVID-19 Response & Impact Fund, una fundación creada específicamente para afrontar esta crisis.

Y en China, Estée Lauder ha donado más de 800,000 dólares a Cruz Roja y 1,4 millones de dólares a la Fundación del Desarrollo de la Mujer que apoya servicios médicos de primera línea.

Paralelamente, la compañía va a reabrir su fábrica en Melville (Nueva York), para producir geles desinfectantes para la población mundial, incluyendo los servicios médicos.

“A medida que la crisis del COVID-19 vaya evolucionando, contribuiremos a añadir nuestros esfuerzos en ayudar a necesidades emergentes, priorizando comida, asistencia médica y de emergencias”, ha concluido la compañía a través de un comunicado”.