Los Perfumistas Académicos de la Fundación Academia del Perfume se reunieron el pasado 19 de julio en Brihuega (Guadalajara) para visitar los campos de lavanda en plena floración, que convierten a esta localidad en un punto obligado para los expertos del sector. Además, pudieron conocer de primera mano la tecnología de vanguardia que se aplica a la destilación en las instalaciones de Intercova Aromáticas, empresa que apuesta por la biotecnología, la reducción energética y el respeto medioambiental.
En el encuentro de trabajo, que contó también con la presencia de patronos de la Fundación, sirvió para debatir sobre temas relevantes para el sector como la perfumería de autor, la relevancia de los perfumes clásicos en la historia de la perfumería en nuestro país y los retos de formación que la Academia quiere asumir en un futuro próximo.
La Academia Española del Perfume se convirtió, a finales del año pasado, en la primera academia del perfume del mundo en contar con académicos en su seno. Consciente del valor que supone la unión en torno a la institución de todo el conocimiento experto de sus Académicos, así como del expertise de sus patronos, ha querido realizar este encuentro de discusión y debate sobre los principales aspectos de la perfumería en nuestro país, que se ha convertido en el primero de otros muchos que la Academia desea realizar con el objetivo de promover la cultura del perfume en nuestro país.
Más de 1.000 hectáreas de cultivo de lavanda colocan a este pequeño municipio alcarreño, situado a 80 Km de Madrid, en el mapa mundial de la producción de esta planta, ya que la lavanda de la Alcarria representa casi el 10% de la producción mundial y, por su alta calidad, es apreciada por los principales compradores mundiales de perfume. En una zona donde las abejas tienen su paraíso y la producción de miel está en la base de su cultura, las lavandas han enriquecido y aromatizado la polinización y el desarrollo de la apicultura local.
Emilio Valeros, perfumista y director técnico de Perfumes Loewe y Académico de Número de la Academia del Perfume, es el director y alma mater de este proyecto desde su origen, y asegura que “hemos seleccionado cada planta, cada variedad de lavanda y lavandín, y cuidamos con exquisito mimo todo el proceso, desde su cultivo hasta el corte de la flor y su inmediato paso a la destilación en cuestión de minutos, para asegurar la máxima calidad de las esencias. Ésta es una destilería ecológica, muy respetuosa con el medio ambiente y que utiliza recursos de última generación con el objetivo primordial de la reducción de la energía utilizada, logrando una altísima calidad de sus esencias”.
Intercova Aromáticas se convierte así en una de las destilerías más avanzadas de Europa con capacidad para destilar 200 Kg de esencia a la hora y con utilización de la biotecnología y de la energía solar en sus procesos. Por su parte, la destilería de lavanda, por todo su proyecto de recuperación de este cultivo desde la ciencia, recibió en 2016 el Premio de la Academia del Perfume a la Innovación, Sostenibilidad y RSC.
